sábado, 28 de agosto de 2010

Duerme conmigo

" Los padres pueden por supuesto elegir ignorarlo (el llanto del bebé), pero tal vez ese niño los ignorará también cuando él tenga 14, 15 ó 16 años" Dr. James McKeena.




La nena lo tiene claro, una cría de mamífero a su edad no puede dormir sola, su vida depende de que un adulto cuide de ella; millones de años de evolución de la especie humana la han preparado para exigir dormir acompañada. Y los grandes estamos tan confundidos, tan alejados de nuestra naturaleza... hasta que nuestros hijos nos convencen de lo contrario.

Pienso que a veces los padres tienen la impresión erronea de que si ellos no entrenan a sus bebés para dormir, de algún modo les estan negando a sus hijos algunas habilidades del desarrollo o habilidades sociales, o que sus bebés nunca en la vida van a aprender a dormir.
Si ellos piensan esto, realmente necesitan saber que nunca ha existido ningún estudio en ningún lado que muestre algún beneficio para los bebés que duermen toda la noche desde edades tempranas, o incluso niños que duerman la noche completa a cualquier edad. Lo que relamente importa es la naturaleza de las relaciones sociales y el apoyo con el que los bebés cuentan para desarrollar todas las habilidades que los llevan a la independencia.

Una de las cosas más importantes que espero hacer es recordarle a los padres que nadie puede decirles lo que deben hacer con sus bebés. Ellos tendrán que aprender a confiar en su propio juicio, revisar la investigación disponible sobre las investigaciones del comportamiento del sueño y darse cuenta que es mucho más criticable el modelo de entrenar a los bebés a dormir solos.

James McKenna. Extraído y traducido por mi del libro Attached at the Heart, 8 Proven Parenting Principles for Raising Connected and Compassionate Children.

9 comentarios:

Ana dijo...

Cierto. Es una pena que nos dejemos llevar tanto por lo que nos dicen los demás, dejando de lado nuestro instinto y nuestro setido comun.

Ana P. dijo...

Ale estoy entre la risa y el llanto con ese video. Recuerdo tantas veces que dejé en la cuna a mis hijos y me arastré fuera reptando como serpiente, sin entender por qué lloraban apenas yo salía de la habitación...

Gisela mami de Aldana dijo...

muy cierto, me encanto leerte!
besos

Ale dijo...

Me pasó lo mismo cuando lo ví por primera vez, entre la angustia de escuchar el llanto y sentir la frustración de la nena, y al mismo tiempo me alegraba ver que tenía bastante clara la forma de hacer que papá se quedara en la cuna.

nubeiro dijo...

Nuestro bebe de 10 meses duerme en nuestra cama, a veces comienza en la cuna y al cabo de tres horas viene a la cama. Hasta ahora no tenemos problema, hombre muy comodo no de duerme y aunque ya no tenemos miedo a aplastarle si a que se caiga de la cama. El problema que aparece ahora es que en las siestas no sabemos que hacer, aveces no puede dormir en la cuna y no siempre podemos echarnos con él . Alivia ver que si otros lo hacen es que no seremos tan raros

Magda Pérez Hervás dijo...

A mi me llamó la atención la cuna, perfecta para compartir, jejeje.

Tienes un regalo en mi blog

vilmati dijo...

La primera vez que ví el video lo ví sin sonido, por lo que no escuché el llanto de la beba, y la verdad...creo que, las heridas que produjeron en mi las actitudes erradas,con respecto al sueño, que mantuvimos unos dias, con nuestra primer hija, Hoy, con el colecho que practicamos con el segundo, han ido cerrando...porque... me eh reido al ver las imágenes! Son geniales! y que tontos quedamos los grandes filmados así.
A veces, cuando Siri duerme la siesta, me acuesto con el, le doy la teta, y en algún momento me alejo...así, como este papá ..de a poquito y sin casi moverlo...jajj ( pero queda en muestra cama, la de los 3!) y...a correr de nuevo a su lado cada vez que despierta!

Beatriz dijo...

Hola Ale desde el otro lado del Atlántico, me ha encantado el vídeo, bueno realmente tengo que agradecerte este maravilloso blog, te leo ávidamente, tanto por tus reflexiones que siempre me abren los ojos como por la cantidad de información que me acercas. Mi hijo Mateo ya tiene 30meses. Dos años y medio de colecho y teta, y a veces cuando intento recordar porqué hemos hecho las cosas de esta manera no puedo más que agradecérselo a mi hijo, que nació tan sabio y nos enseñó tantas cosas. BICOS

Beatriz dijo...
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