Al pie de nuestra casa hay una pendiente que siempre nos ha servido para divertirnos rodando. Y la semana pasada salimos a rodar.
Luego, propuesta por Santi, claro, una carrera...Después, encontramos una mejor "rampa" en donde los carros iban más rápido. Nos pasamos así esa tarde, rodando carros por las pendientes, pero no sólo de arriba abajo como se pensaría, no, también lo intentamos de abajo hacia arriba; midiendo tiempos, separados, juntos, uno encima del otro...
1 comentario:
Ay qué ricoooo, yo también pensé en rodar por una ladera, pero aquí con el frío y la lluvia, imposible!!
Os añado ;)
Un besito Ale
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