Extra-proyecto

Camino a casa, Santiago observaba una botella de plástico vacía que traía en las manos y me dice:

- Mamá, quiero coservar esta botella, no quiero tirarla

- Ah sí

- Si, qué pasaría si la lleno de agua?

- Tú que crees que pasaría?

- Mmhmm creo que la llenarré de agua y entonces puedo meter juguetes y bañarlos aquí! Pero mamá, debo escoger juguetes pequeños, no juguetes grandes, los juguetes pequeños como mi Robin caben por aquí y se pueden meter al agua.

- Me parece buena idea. Podemos hacerlo llegando a casa.

- Si, vamos a hacer un proyecto!!. Pero mamá mejor no quiero meter a Robin porque entonces no lo podré sacar, mira, mi mano es más corta que la botella, no lo voy a alcanzar.

- Uy si, qué crees que puedes hacer para sacar a Robin?

- Pues, mamá, no lo podré sacar porque mi mano es corta y un poco gorda, no cabe por la botella. Pero mmhmm es que no quiero voltearla porque saldrá primero el agua y luego el Robin, entonces todo el piso se va a mojar!

- Y si lo hacemos afuera en el jardín? ahí no importa que se moje el piso...

- Sí mamá, vamos a hacerlo!!

Creo que mi hijo piensa que no soy la única de la casa que puede llegar una tarde y proponer un "disparate" (como jugar a pintar ventanas o ponerle juguetes a los cubos de hielo) para jugar nombrándolo "proyecto"... Y creo que ha captado la escencia que le he querido dar a nuestros proyectos semanales, de experimentar algo nuevo e inquietante. Y estoy contenta por ello.

Así que aquí está lo que llamo el Extra-proyecto propuesto por mi hijo.

Al final salimos al jardín, llenó la botella con agua, comprobó que Robin no cabía en la botella y trajo juguetes más pequeños, comprobó cuáles cabían, cuáles flotaban, cuáles se hundían...

Luego vaciaba la botella y estaba felíz de comprobar que si, que al voltear la botella siempre el agua salía primero que el juguete.

Y por supuesto, repitió el experimento tantas veces como fué necesario...